De Genaro: “La CGT era funcional al gobierno de Menem”

Por Desiré Cano

El secretario institucional de la central dijo que, así como el gobierno de Cristina Fernández apoya a unos sindicatos en detrimento de otros, también “privilegia a las petroleras, a las girasoleras” y a otras empresas transnacionales.

El ministro de Trabajo, Carlos Tomada, sostuvo la semana pasada que otorgar la personería gremial a la Central de Trabajadores Argentinos (CTA) “tiene sus riesgos” y defendió el lugar de la CGT como única central porque fue "ha significado una valla para que los trabajadores no vieran vulnerados sus derechos, para que hubiera protección del empleo y presencia sindical".

Para el dirigente de la CTA, Víctor De Genaro, “lo de Tomada es una confesión clara” que tiene que ver “con la continuidad laboral y económica de los últimos años, que sigue manteniendo la tasa de hambre, de pobreza, de precariedad, falta de justicia con nuestros jubilados y despidos masivos para trasladar la crisis a los trabajadores”.

De Genaro recordó que en los años ‘90, el actual titular de la cartera laboral era abogado de la CGT y que, por ende, “defiende a un sindicalismo que naturalizo la precarización laboral”.

“Nosotros no nos metemos en la interna de la CGT, pero nosotros nos fuimos de la CGT hace muchos años, cuando la CGT era funcional al gobierno de Menem”, subrayó.

Además, denunció que este “es un Gobierno que privilegia a las petroleras, a las girasoleras, en definitiva a los que se han beneficiado de los recursos naturales y humanos de nuestro país” y que es por este motivo que al “no le gusta darle la personería a un sindicato que le hace frente a la Barrick Gold”.

Tomada afirmó hoy que la personería de la CTA no es "una cuestión a resolver fácilmente cuando estamos hablando de ciertos rasgos que podrían modificar un modelo sindical que tiene 60 años de vigencia en Argentina", modelo que "con sus más y con sus menos ha significado una valla para que los trabajadores no vieran vulnerados sus derechos, para que hubiera protección del empleo y presencia sindical".

Para el ministro, "modificar eso, conlleva algunos riesgos que hace que la decisión no se pueda tomar de un momento a otro", aunque aseguró “que es un tema sobre el que estamos atentos".

En la misma línea que De Genaro, el legislador electo de Proyecto Sur y dirigente de la CTA, Fabio Basteiro, criticó los dichos de Tomada y consideró que "el hecho de no reconocer a la central esconde por parte del gobierno nacional y la burocraia sindical, la verdadera intención de continuar con el trabajo precarizado, los despidos y la no distribución de los ingresos".